
Rollitos de Calabacín y Salmón
Comenzaremos por hacer un buen caldo aromático y ligero pelando y cortando en trozos grandes la verdura. Rehogamos en una cacerola con el aceite, a continuación añadimos el salmón y tostamos un par de minutos. Añadimos el eneldo fresco y cubrimos con agua y un puñado de sal. En 30 minutos tendremos un buen caldo que colamos y guardamos en la nevera para que enfríe. Antes de usarlo quitaremos toda la grasa que podamos.
Para los rollitos, primeramente picaremos las berenjenas de Almagro muy menudas para mezclarlas con el queso crema. Con la ayuda de un buen cuchillo laminaremos el salmón curado y con una mandolina sacaremos unas tiras de calabacín muy finas para que sea fácil enrollarlas.
Para montar los rollitos aplicamos la misma técnica que para hacer sushi. No hace falta que tengáis una esterilla de bambú, con papel film es suficiente. Ponemos un buen trozo en la encimera y colocamos las tiras de calabacín en horizontal montándolas una sobre otra, con cuatro o cinco será suficiente para cada rollito.
Ahora cubriremos la misma superficie con las láminas de salmón, la mezcla de queso crema la retiramos unos 4cms del borde y tomando el extremo del film con las dos manos empezamos a enrollar haciendo un poco de presión y dando forma. Cuando lleguemos al final cortamos el film sobrante y cerramos el rulo por ambos extremos.
Como se trata de un plato frío, es conveniente meter los rollitos en la nevera o unos minutos en el congelador para que todo tome más consistencia a la hora de cortar. Con un cuchillo muy afilado y despacito, desechamos los bordes y cortamos las rodajas al gusto.
Servimos volcadas en un plato decorando con una ramita de eneldo. Le iría fenomenal por textura y decoración unas huevas de salmón. Ahora con el caldo frío trasvasado a una jarrita regamos el plato hondo desde uno borde.
Ingredients
Directions
Comenzaremos por hacer un buen caldo aromático y ligero pelando y cortando en trozos grandes la verdura. Rehogamos en una cacerola con el aceite, a continuación añadimos el salmón y tostamos un par de minutos. Añadimos el eneldo fresco y cubrimos con agua y un puñado de sal. En 30 minutos tendremos un buen caldo que colamos y guardamos en la nevera para que enfríe. Antes de usarlo quitaremos toda la grasa que podamos.
Para los rollitos, primeramente picaremos las berenjenas de Almagro muy menudas para mezclarlas con el queso crema. Con la ayuda de un buen cuchillo laminaremos el salmón curado y con una mandolina sacaremos unas tiras de calabacín muy finas para que sea fácil enrollarlas.
Para montar los rollitos aplicamos la misma técnica que para hacer sushi. No hace falta que tengáis una esterilla de bambú, con papel film es suficiente. Ponemos un buen trozo en la encimera y colocamos las tiras de calabacín en horizontal montándolas una sobre otra, con cuatro o cinco será suficiente para cada rollito.
Ahora cubriremos la misma superficie con las láminas de salmón, la mezcla de queso crema la retiramos unos 4cms del borde y tomando el extremo del film con las dos manos empezamos a enrollar haciendo un poco de presión y dando forma. Cuando lleguemos al final cortamos el film sobrante y cerramos el rulo por ambos extremos.
Como se trata de un plato frío, es conveniente meter los rollitos en la nevera o unos minutos en el congelador para que todo tome más consistencia a la hora de cortar. Con un cuchillo muy afilado y despacito, desechamos los bordes y cortamos las rodajas al gusto.
Servimos volcadas en un plato decorando con una ramita de eneldo. Le iría fenomenal por textura y decoración unas huevas de salmón. Ahora con el caldo frío trasvasado a una jarrita regamos el plato hondo desde uno borde.